Pasé mis vacaciones de verano en la hermosa ciudad de San Cristóbal de las Casas, Chiapas, México.
Durante tres días estuve en un taller aprendiendo a tocar flauta Shakuhachi y ocarina. Una experiencia por demás enriquecedora por todos los momentos que vivimos y porque ahora es mi propósito aprender a tocar ocarina…
(Flores que vi durante el concierto de clausura del taller)
Y esta es la silla de la felicidad en dónde me quiero quedar a vivir por siempre…
Un postre que probé mientras buscaba el lugar del concierto. Es un atole de maíz con vainilla y un postre de plátano con frijol dulce. La cafetería se llama La Capitanía y es un lugar cómodo, limpio y con platillos exóticos para degustar. También es un excelente lugar para realizar la cata de chocolate y aprender más sobre este importante alimento que es la base de mucho de los platillos que allí se sirven.